Pero ¿por qué tantos han creído que era posible, y por qué tantos otros que ni lo han comprobado afirman rotundamente que está aceptada?
Fallar a la audiencia una vez puede parecer poco relevante, quizá hasta meritorio, pero el salto cualitativo entre no fallar nunca y hacerlo una vez es el que nos lleva a permitir que los malintencionados se apoyen en esa «excepción» para hacer creíble cualquier otra supuesta repetición, por irreal que pueda ser. Si lo hiciste una vez lo puedes repetir. Y eso te puede crucificar. Si la RAE no hubiera aceptado antes «Almóndiga» muy probablemente el bulo de la «Cocreta» no habría calado.
Cada acción que acometemos y cada decisión que tomamos, como empresa y como profesionales, nos proyecta hacia el público. Si cometemos un error es mejor ser coherente y reconocerlo que pretender disfrazarlo u ocultarlo para que no conste. Al final «se coge antes al mentiroso que al cojo», como reza el refrán. Si quieres que la audiencia dude de un posible ataque mediante Fake News practica la coherencia y la honestidad como principales barreras para que no te salpique esta lacra.
Que sostener la «almóndiga» no te cargue con el lastre de las «cocretas»